"Una parte esencial de la sabiduría de vivir, es la capacidad para renunciar, para abandonar respuestas obsoletas, relaciones desgastadas y tareas que van más allá del propio potencial".
Fritz Perls
Fundador de la Terapia Gestalt
¿Para qué necesito terapia?
La terapia no es para quien la
necesita, la terapia es para quien la quiere y, en el caso de la dependencia emocional, es para aquellas personas
que agobiadas de sufrir en nombre del amor, cansadas de elegir malas parejas, agotadas
de vivir durante años en una relación tóxica o de encadenar relaciones
complicadas que no van a ninguna parte, desean hacer alguna cosa para cambiar
su patrón y empezar a establecer vínculos afectivos más saludables.
Muchas veces llegamos a terapia
después de haber intentado infinidad de veces arreglar, restablecer o dejar una
relación, cuando ya hemos tocado fondo, desde la derrota y la aceptación de que
solos o solas no podemos con un problema que nos supera y, entonces, decidimos
buscar ayuda.
Puede ser que decidamos hacer
terapia porque hemos acabado con una relación y estamos pasando por el síndrome
de abstinencia típico de la dependencia emocional, nos sintamos muy débiles y
vulnerables y necesitemos apoyo para superar y cerrar adecuadamente esta etapa.
Tal vez tengamos en este momento
una pareja y por diversos motivos nos estemos cuestionando la relación. Puede
que hayamos detectado que no es una relación equilibrada, que no hay
reciprocidad de cariño, que existe dependencia, miedo al abandono, falta de
motivación y decidamos hacer alguna sesión de terapia para evaluar la relación,
clarificar nuestros sentimientos y decidir qué queremos hacer.
Otras veces, aunque no hayamos
vivido relaciones muy tóxicas, decidimos hacer terapia porque hemos tomado
conciencia de nuestra tendencia a obsesionarnos en el amor y queremos aprender
a hacer buenas elecciones amorosas. Queremos trabajar nuestra autoestima para
tener relaciones más bonitas, que no comporten dependencias y evitar que el
amor nos traiga penas.
En todo caso, la terapia sirve
para conocer el propio funcionamiento, comprender aquello que nos ocurre,
trabajar nuestras sensaciones, emociones, pensamientos, deseos, necesidades, y
toda aquella información que nos permita decidir consciente e inteligentemente
nuestra conducta. No es que la terapia sea necesaria para vivir, pero aporta
libertad y significa responsabilidad con uno mismo y con los demás.
El/la terapeuta
No hay buenos terapeutas, sino buenos pacientes.
Erv y Miriam Polster
Por experiencia personal como
dependiente emocional, estoy convencida de que para recuperarnos de esta
adicción hay que trabajar con un/a terapeuta que conozca a fondo este problema,
si no es así y aun con las mejores intenciones por parte del profesional, se
puede causar más mal que bien en el terapiado.
Como terapeuta, no sólo es importante
conocer la teoría y las técnicas, sino también haber experimentado en la propia
piel el dolor que provoca la dependencia emocional y haber recorrido una misma
el camino hacia la recuperación.
La recuperación de la dependencia
emocional no consiste en llegar a una meta, sino más bien, en trabajar con
conciencia y día a día, para no recaer en nuestros patrones adictivos de
relacionarnos. De alguna manera, siempre deberemos estar alerta para no
tropezar otra vez con la misma piedra
También es importante que el/la
terapeuta haya estudiado las creencias
culturales sobre el amor y ayude al terapiado a revisar los mensajes (introyectos)
que ha incorporado desde la niñez sobre lo que significa amar en nuestra
sociedad y en nuestro tiempo.
Estoy convencida de que la
terapia ayuda en la recuperación de las dependencias emocionales, esta es la
creencia que me motiva a hacer mi trabajo. Y la fe que tengo en todas aquellas
personas que acuden a terapia para encontrar en sí mismas la fuerza para
transformarse y evolucionar.
Para pedir cita
Vía y precios
.
Vía
|
1 sesión
| |
Presencial
|
30 €/ hora,
| |
Skype
|
20 €
| |
Mail
|
10 €
|
2. Pagar la sesión a través de transferencia bancaria con los datos que te proporcione a través del mail, o pulsando en el botón de Paypal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario